Atrás vamos dejando, poco a poco, el invierno. Van apareciendo los primeros rayos de sol y con ellos las ganas de pasar más tiempo en la calle. La primavera está a la vuelta de la esquina, y si de algo es sinónimo esta estación del año es de las Primeras Comuniones.
La Primera Comunión es una celebración religiosa que, cada vez más, se ha convertido en un motivo de reunión con familiares y amigos en los que el rey o reina indiscutible del día es el pequeño o pequeña de la casa. A penas faltan un par de meses para ver las calles llenas de niños vestidos con sus galones marineros y a las niñas con sus flamantes vestidos blancos. También los hay que ese día deciden ponerse lo que más les gusta en el mundo: el traje de su equipo favorito de fútbol, la equipación oficial del deporte que practican, etc. y es que ellos son lo más importante.
La Primera Comunión ha pasado, ya, a ser una “mini boda”, y es que implica un tiempo de organización y preparación semejante: reunir a los seres queridos en torno a una mesa celebrando un día de suma importancia lleno de ilusión, cariño y emoción.
Y como no podía ser de otra manera, el Reportaje de Primera Comunión es un clásico entre los regalos de este día. Un recuerdo para toda la vida, un reflejo de la personalidad de los más pequeños, de la expectación que, el gran día, refleja en sus inocentes y risueños rostros.
En 50mm fotógrafas somos unas amantes de los grandes acontecimientos, pero lo somos más, si cabe, de esos pequeños instantes que se convierten en inolvidables, una característica intrínseca de nuestros reportajes.
El reportaje de Primera Comunión puede ser realizado en exterior, como en el caso de Maialen, que pudimos aprovechar al máximo el día soleado y nos fuimos al Jardín Botánico de Santa Catalina a derrochar sonrisas.
No obstante, en una ciudad como Vitoria-Gasteiz, siempre tenemos que contar con un plan b, y eso fue lo que hicimos con Iraia y su familia, disfrutar de nuestro plan b en el estudio de fotografía de 50mm fotógrafas. Reímos, bailamos, y sobre todo vivimos la sesión como algo único y memorable.
El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices.
Recuerda el día de la Primera Comunión de tu hijo, hija, nieto, nieta, sobrino, sobrina… a través de las imágenes de 50mm fotógrafas. Un recuerdo, es para siempre.